lunes, 19 de marzo de 2012

Aullidos


Tenían razón, mis amantes en eso de que antes el malo era yo, con una excepción, esta vez yo quería quererla querer, y ella no, así que se fue…

Bordeo la superficie de la idea haciendo equilibro para no caer en ella, mido mis pasos y respiro hondo, intento pensar que es irreal la posibilidad de verme envuelto en el debate de la idea, por eso me cuido, aparecen fuertes vientos que conspiran por verme caer, pero mantengo alerta mis sentidos, sé que he de llegar ileso a la otra punta, quizás en mi viaje de vuelta haga un perfecto clavado desde mi borde y cruce a brazadas, y me moje y me haga parte de ella, pero aún no sé que se cuece en sus vapores, aún corro el riego de quemarme si resbalo , aún no llevo traje protector contra sus influjos. Merodeo sopesando en cómo debo seguir, donde he de exponer mi próximo alegato, quien será mi público y sobre todo, si tendrá el efecto deseado. Desde aquí la batalla se ve perdida incluso antes de librarla, si vivieras en mi planeta al menos!!!,  pero has decidido mudarte a donde las palomas nunca llegarían con sus mensajes, donde estos suspiros no serian audibles, te has ido lejos, más allá del más allá. Acá dejaste tus llaves, porque solo abren puertas de aquí, se ha roto el dique y hemos quedado en orillas distantes, y todo ha sucedido durante la noche, solo ahora que comienzan a desperezarse las primeras luces se puede ver la magnitud del impacto, te hare una lista y te enviare la cuenta, mientras tanto, ladraré mis preguntas a la luna y esperaré paciente su respuesta.

…y lo siento por ti, que perderás amor y tendrás penas, y por mí, que para olvidarte cuanto he de extrañarte nena!!! 

PD: con la colaboración de los amigos de siempre al rescate (Juaco y Rey).

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