lunes, 24 de agosto de 2015

Entre un caballero y una dama.


Parado frente a ella, mirándola insolente desde su altura, tan cerca que roza constantemente sus pequeños senos, Blanco Sucio propone a Little Sex: Si poniéndote de puntillas logras llegar a mis grandes labios con un beso, prometo acordarme mañana de  tu nombre y pago tu próxima ronda. Little Sex solo escucha, mientras, va tomando forma esa sonrisa pervertida que cuelga de su boca, baja lentamente sus ojos a la par de sus manos hasta detenerlas sobre su sexo -: Si poniéndote de rodillas y con esos tus grandes labios, logras en un solo beso, tocar cada parte de mis ganas, trust me, pagaré toda tu noche en la barra y hasta el cuarto al cual te arrastraré. Challenge acepted acuerdan, saben lo que quieren, son casi adultos, son sucios, saben aparcar el alma. Y entonces se los tragó la noche, en las calles de aquella vieja dama,  les faltaron fuerzas, le sobraron ganas.